El director del Centro de Investigaciones Económicas de la UANL, Édgar Luna, brinda una serie de recomendaciones para lograr uno de los principales propósitos de año nuevo: ahorrar dinero para solventar gastos mayores o cubrir eventualidades.
Comienza el primer mes del año y con ello diversos propósitos como ahorrar dinero para adquirir productos o servicios, o bien, poder enfrentar alguna eventualidad.
Sobre el tema, el director del Centro de Investigaciones Económicas de la UANL, Édgar Luna, explicó que los gastos hormiga, como la compra de un café diario, pueden ser un obstáculo y, además, representan hasta un 30% del ingreso de una persona.
También resaltó que este proceso no se hace de la noche a la mañana y, para lograrlo, primero se debe fijar un presupuesto para cubrir las prioridades y posteriormente destinar una cantidad al ahorro.
“El ahorro al final del día es una cantidad de dinero que le dedicas a otras cosas que no son el consumo. Los hábitos del ahorro empiezan de a poquito. Si nunca has ahorrado, empieza de a poco, a lo mejor un 5 por ciento de tu ingreso, pero generalmente se recomienda que sea el 20 por ciento.
“El tener un presupuesto te va a permitir poner prioridades en cuanto al gasto. Esto lo necesito, esto es un deseo o esto no es prioridad”.
La importancia de contar con objetivos
El especialista de la Universidad Autónoma de Nuevo León señaló la importancia de tener liquidez para solventar ciertos imprevistos relacionados con la atención médica.
Sin embargo, dijo que este fondo también permite costear algunos bienes de oportunidad que pudieran presentarse eventualmente.
Preparar la comida en casa y hasta caminar en lugar de tomar taxi para ciertos traslados puede hacer la diferencia para cumplir con el objetivo de ahorrar.
“Ayuda mucho cuando estás ahorrando el tener objetivos. Tú puedes ahorrar para el enganche de un auto, pero cuando tú tienes objetivos claros, el ahorro se facilita más, aunque también hay que tener en cuenta que el ahorro debe ser para hechos que no nos esperamos, por ejemplo, alguna enfermedad”, apuntó Édgar Luna Domínguez.
Aunque el ahorro puede realizarse de distintas modalidades que van desde una alcancía hasta algo más formal como guardar el efectivo en un banco, lo más recomendable es que se genere algún porcentaje de ganancia.
“Cuando yo ahorro, puedo hacerlo debajo del colchón y ese es un ahorro. Pero cuando yo invierto, ese dinero debajo del colchón lo pongo a que genere más dinero, lo pongo en una cuenta de ahorros, lo invierto en bonos del gobierno.
“Otra manera de ahorrar y que es muy popular en México son las tandas. Te metes a una tanda y al final te obliga a ahorrar, esa puede ser también una estrategia. Sin embargo, no hace que tu dinero crezca”, externó.
El director del Centro de Investigaciones Económicas de la UANL además previno sobre el uso desmedido de las tarjetas de crédito en las que las tasas de interés son altas y, si no se cubren a tiempo, pueden generar un desequilibrio económico para los ciudadanos.
“Las tarjetas de crédito pueden ser una trampa para aquellos compradores compulsivos que apenas ven determinada cosa y ya quieren adquirirla, aunque no la necesiten.
“Una tarjeta de crédito tiene una tasa de interés, ya con comisiones y todo, del 40 por ciento. Entonces, si tú te endeudas con una tarjeta de crédito y luego empiezas a pagar el mínimo, esa deuda va a ir creciendo y vas a tardar mucho tiempo en saldarla”, advirtió Luna Domínguez.
Tips de ahorro
· Establecer un presupuesto
· Buscar un mecanismo formal para este objetivo
· Evitar gastos hormiga
· Tratar de ahorrar el 20% del ingreso
· Tener cuidado con las tarjetas de crédito