Investigadores de la UANL y la UNAM han establecido la relación que existe entre la inflamación del cerebro por envejecimiento y el deterioro del conocimiento y la apreciación de la realidad.
Uno de los problemas que trae consigo el paso de los años en las personas son las alteraciones que sufre el cuerpo, y una de las que tienen mayores consecuencias en la salud son la inflamación del propio cuerpo y la alteración de los tejidos.
Más aun si dicha inflamación se focaliza en el cerebro, conocida comúnmente como neuroinflamación, debido a que puede inhibir el deterioro cognitivo.
Esto lo confirmó el doctor Alberto Camacho Morales, profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Nuevo León, a través de la investigación “La neuroinflamación y el volumen cerebral predicen el deterioro cognitivo durante el envejecimiento”.
“Con el tiempo, diversas partes del cerebro se van inflamando y por consecuencia se va reduciendo la capacidad de funcionar de manera correcta. Se altera la visión del mundo, los recuerdos, la respuesta a los miedos o las agresiones, y creemos que esto puede ser causado por la neuroinflamación”, expuso el ganador del Premio de Investigación UANL 2023.
De acuerdo con el especialista, el cerebro va cambiando con el envejecimiento, nuestro cuerpo se inflama y aparecen “heridas” internas en él, las cuales se acumulan y es entonces cuando comienza el deterioro.
Para Camacho Morales, existen múltiples factores que pueden ser la causa de este padecimiento, pero los más comunes son la exposición a una dieta con alto contenido energético, ausencia de actividad física y la exposición a diferentes contaminantes o infecciones.
“Se sabe muy bien que la comida rápida contiene ciertos nutrientes que no son aptos para el organismo y si su consumo es por décadas se presenta un mayor riesgo de que existan estas ‘heridas’ porque eso genera inflamación”, indicó el especialista de la UANL.
Envejecer sanamente
Esta investigación es el resultado de un trabajo conjunto de la Facultad de Medicina y la Facultad de Ciencias Biológicas de la UANL, con el Instituto de Neurobiología de la UNAM, el cual dotó de instrumentos de análisis de imagen cerebral.
“Este proyecto surgió de una gran colaboración con la doctora Diana Reséndez Pérez, adscrita a la Facultad de Biología, y específicamente formó parte de la tesis doctoral de la ya doctorada Marcela Cárdenas Tueme, quien fue la líder de esta investigación”, señaló el docente de la Facultad de Medicina.
“Lamentablemente el envejecimiento del cuerpo no se puede detener. La neuroinflamación y la inflamación del cuerpo no se pueden detener; es parte de nuestra esencia como humanos, porque así somos. De hecho, anteriormente no vivíamos tanto tiempo, hoy en día podemos vivir entre los 80 y 90 años y eso trae un alto riesgo para el desarrollo de más enfermedades.
“Es bueno vivir más años, pero es mucho mejor vivirlos sanamente, por lo que es importante controlar la inflamación relacionada con el envejecimiento, la cual no podemos detener. En este sentido, las únicas alternativas que pudiéramos tener hoy para poder envejecer de manera sana es mantener una buena calidad de vida, con una buena dieta y haciendo ejercicio regularmente, aunque algunas veces es muy difícil para algunos de nosotros”, finalizó Camacho Morales.