Ante los constantes sismos registrados en el estado, el coordinador de Movimiento Ciudadano en el congreso, Eduardo Gaona, promueve una iniciativa para reformar la Ley de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano estatal.
Con la iniciativa se busca establecer el concepto de riesgo sísmico, debido a que Nuevo León sí se encuentra dentro de una zona sísmica, la cual es denominada “Curvatura de Monterrey”, y a pesar de ello, no existen políticas públicas en la materia.
El caso más reciente se registró el pasado 1 de noviembre, cuando el Servicio Sismológico Nacional (SSN) reportó que en García se registró un sismo de 3.9 grados.
Según archivos periodísticos, la actividad sísmica en Nuevo León es frecuente, principalmente en municipios como Salinas Victoria, Montemorelos, Guadalupe, Santa Catarina, Monterrey, San Pedro y Escobedo, entre otros.
Con la iniciativa se da un primer paso para que las presentes y futuras construcciones, por Ley, tomen en cuenta el atlas de riesgos generados por las autoridades competentes, y se implementen materiales y técnicas de construcción adecuadas con la finalidad de reducir riesgos y catástrofes a futuro.
Es decir, se promueve la creación de políticas públicas en materia de sismos, a fin de que las ciudades estén preparadas para un fenómeno de este tipo.
“Las investigaciones han señalado la necesidad de adecuar la regulación en la construcción, así como las políticas públicas de desarrollo urbano”, dijo el coordinador de la Bancada Naranja.
“Consideramos que es necesario fortalecer desde la legislación los lineamientos y requisitos que conforman los programas de ordenamiento territorial y construcción con la finalidad de establecer en construcciones presentes y futuras la previsión de los riesgos, tanto ambientales como sísmicos”.
Gaona puntualizó que al estar dentro de la “Curvatura de Monterrey”, es común que en Nuevo León se registren sismos entre los 4.2 y 4.8 grados en la escala de Richter.