Para acompañar al ciudadano José Fernando Cortez García, la vicecoordinadora de la Bancada Naranja, Sandra Pámanes, estuvo presente en la Oficialía de Partes del Congreso para entregar una iniciativa a fin de modificar el Código Civil del estado.
Con la iniciativa, se busca reforzar el derecho de identidad biológica, que se refiere a que cualquier persona merece saber quién es, cuál es su nombre, cuál es su origen, y quiénes son sus padres biológicos.
Con la Ley actual, este derecho se pierde a partir de los 20 años, por lo que se busca que sea imprescriptible; es decir, que no tenga vigencia y el derecho se pueda reclamar a cualquier edad.
Al ser imprescriptible, cualquier persona puede exigir ante la Ley el hecho de que se investigue y se compruebe la paternidad o maternidad biológica.
Y en los casos en los que no se reconocía al hijo o hija, si se comprueba la paternidad o maternidad, se aplicará una sanción de indemnización para el reparo integral sobre el daño moral sufrido por la falta de reconocimiento a su descendiente.
“Los diputados también somos un medio que tiene que ser muy accesible a la ciudadanía para que las iniciativas ciudadanas puedan tener este espacio a través de nosotros”, dijo la Vicecoordinadora.
“Solamente había dos años posterior a la mayoría de edad para poder solicitar el reconocimiento legal de cada uno de los hijos, pero dos años son muy poco tiempo en realidad para, incluso, hacer las indagatorias necesarias y dar con el padre o madre de los menores”.
En la iniciativa se detalla que, según cifras oficiales, durante el 2017, el 48 por ciento de las madres en México reportaron estar casadas, 23 por ciento vivían en unión libre, el 10 por ciento eran viudas, el 9 por ciento informaron estar separadas, el 7 por ciento eran solteras, y el 3 por ciento estaban divorciadas.
Y con base al Censo de Población y Vivienda 2010 del INEGI, se reflejó que cuatro de cada 10 hogares en México no habitaban el padre de familia; es decir, en 11.4 millones de hogares faltaba el padre de familia.
“Ya se pretende imponer una sanción para reparar todo el daño de la ausencia de los padres o madres (…) Es una reparación integral, el Poder Judicial tiene incidentes, no es una cuantía, tal cual, no es una cuota fija, pro sí es la única manera de hacer esa reparación” explicó Cortez García.
“(La sanción) es un monto económico mediante un incidente, y comprobando cuales fueron mis afectaciones por su ausencia”.